El cuerpo humano necesita elementos básicos para crecer y estar sano. Es igual con su matrimonio. Con estas cualidades, expresión y comprensión crecen y prosperan. Sin ellas, muere.

Acepte el uno al otro

La aceptación significa tomando el uno al otro como es. La palabra en inglés viene de la palabra en el latín que significa, literalmente, el tomarse bien a sí mismo. Aceptando su cónyuge no quiere decir que apruebe totalmente toda acción y actitud. Pero sí quiere decir que estamos en el mismo equipo, y felices de estarlo.

Miembros de un equipo conocen las fuerzas y las debilidades de cada jugador. Pero en vez de desear cambiarse de equipo, aprenden a reconocer sus fuerzas y hacer al equipo más fuerte por ellos, y al mismo tiempo aprenden a hacer más fuerte sus debilidades.

La diferencia entre ganar y perder es, frecuentemente, más actitud que habilidad. Claro, para otras personas tal vez les sea más fácil construir un matrimonio maravilloso. Tal vez tengan fuerzas que usted y su cónyuge no poseen naturalmente. Pero ustedes no son otras personas. Dios sabe cómo ayudarle a usted y su cónyuge llegar a un matrimonio feliz, no importa las fallas que tengan.

Cree lo mejor

La naturaleza humana tiende a buscar lo peor y creer lo peor. En vez de hacer eso, cree usted en lo mejor. ¿Habrá tiempos cuando le engañen? Sin duda. Pero, si no tiene razones sólidas por sus sospechas, échalas a la basura. La sospecha daña muchas relaciones, a veces más allá de la posibilidad de reparación.

Concéntrese en la compresión

Es más difícil de lo que piensa, porque la mayoría de nosotros usamos nuestra energía haciendo nuestro propio punto en vez de tratando de comprender al otro.

Destruya el prejuicio

Prejuicio quiere decir el hacer un juicio sin informarse. Es hacer una decisión que no le gusta algo aún antes de probarlo. Es rechazar una idea porque usted no pensó en ella. Es determinar que no le va a agradar la hermana de su esposo antes de tomar el tiempo de conocerla.

Prejuicios bloquean comprensión. Gente con prejuicios viven vidas secas y tristes, y pasan por alto los gozos. Decida ahora que va a destruir cualquier prejuicio por rehusar hacer juicios hasta que ya conozca todos los hechos. Deje que los hechos le convence y cambie su perspectiva.

Fomente franqueza

Puede fomenter franqueza, pero nunca lo puede forzar. Personas no son ostiones para ser abiertos a cuchilladas. Debemos respetar el derecho que tiene cada persona por no revelar su persona íntima todo mundo.

En vez de abrirlo a la fuerza, invítelo. Cuando vivíamos en Nigeria contraje pústulas dolorosas. Yo quería forzarlas y sacar el veneno por apretarlas, igual como se aprieta un grano. Pero mi esposa, que es enfermera, me salvó de ese error. Me explicó que si hacía eso, podría forzar el veneno directo a mi flujo sanguíneo y podría posiblemente morir. Entonces me hizo una compresa tibia antiséptica que aplicamos en las pústulas hasta que se abrieron y el veneno salió sin peligro. El amor caluroso y animador hará lo mismo. Fomenta franqueza.

Perdone la impulsividad

Todos hemos dicho palabras que nos gustaría tragar de nuevo, palabras dichas en enojo y descuido. Cuando nuestro cónyuge dice palabras así, haga una de dos cosas: déjelo pasar o pídale que clarifique. No deje que una palabra descuidada cambie sus sentimientos positivos acerca de su esposo o esposa. Al contrario, perdone y déjelo.

Conceda gracia

Gracia es lo que necesitamos el uno del otro cuando nos portamos de una manera fea y desagradable. Gracia es amabilidad inmerecida. En cualquier relación, la gracia es absolutamente esencial, porque todos tenemos fallas y a veces nos portamos de maneras desagradables. Cuando su esposo o esposa despierta de mal humor, usted puede escoger reaccionar negativamente o positivamente. Concediendo gracia es una respuesta positiva.

Humíllase

¿Sabía que usted no puede forzar la humildad en su cónyuge ni en nadie más? Los puede humillar, pero no los puede hacer humildes.

Por favor no deje que esta palabra le asuste. Humillándose no significa que se vuelva en un trapo para pisotear. La humildad es simplemente la diferencia entre ser razonable y ser terco; es o conflicto no resuelto y el llegar a un acuerdo.

A veces el orgullo es bueno. Está bien tener orgullo en su trabajo y en lo que ha cumplido. Es maravilloso estar orgulloso de sus hijos. Pero hay un tipo de orgullo que es venenoso. La autojustificación y la protección de sí mismo puede ser orgullo venenoso. Cuando nos controla, es imposible para otros vivir con nosotros.